Más que servicio, atención al cliente, es una actitud amable, dispuesta, una mirada a la mesa buscando una señal del cliente, unos ojos que sonríen cuando sirven, una voz que invita a volver siempre.
Más que servicio, atención al cliente, es una actitud amable, dispuesta, una mirada a la mesa buscando una señal del cliente, unos ojos que sonríen cuando sirven, una voz que invita a volver siempre.